FORD MUSTANG
El Nacimiento del Ícono (1964-1973)
En 1964, Ford presentó el Mustang como un modelo 1965, utilizando la plataforma del Ford Falcon. Fue un éxito instantáneo, con más de 22,000 unidades vendidas el primer día. Su diseño elegante, largo capó y trasera corta definieron su estética. Bajo el capó, las opciones de motor iban desde un modesto seis cilindros hasta un poderoso V8, lo que permitió personalización y desempeño. El Shelby GT350 (1965) y el Boss 302 (1969) se convirtieron en leyendas de las pistas.
A medida que avanzaba la década de 1970, el Mustang creció en tamaño para satisfacer las demandas del mercado, perdiendo algo de su agilidad original. La crisis del petróleo y las regulaciones ambientales obligaron a Ford a priorizar eficiencia sobre potencia, lo que marcó el final de la era de los muscle cars clásicos.

El Nacimiento del Ícono (1964-1973)
En 1964, Ford presentó el Mustang como un modelo 1965, utilizando la plataforma del Ford Falcon. Fue un éxito instantáneo, con más de 22,000 unidades vendidas el primer día. Su diseño elegante, largo capó y trasera corta definieron su estética. Bajo el capó, las opciones de motor iban desde un modesto seis cilindros hasta un poderoso V8, lo que permitió personalización y desempeño. El Shelby GT350 (1965) y el Boss 302 (1969) se convirtieron en leyendas de las pistas.
A medida que avanzaba la década de 1970, el Mustang creció en tamaño para satisfacer las demandas del mercado, perdiendo algo de su agilidad original. La crisis del petróleo y las regulaciones ambientales obligaron a Ford a priorizar eficiencia sobre potencia, lo que marcó el final de la era de los muscle cars clásicos.



El Rediseño Retro y la Modernidad (1994-2004)
La cuarta generación (1994-2004) marcó un cambio hacia un diseño más aerodinámico, manteniendo detalles que homenajeaban a los modelos originales, como los faros delanteros y las luces traseras de tres barras. La tecnología y la seguridad tomaron mayor protagonismo, y los motores ofrecían mayor potencia con mejor eficiencia.


El Regreso al Pasado y la Innovación (2005-presente)
La quinta generación (2005-2014) trajo un diseño retro-moderno, inspirado en los Mustangs de los años 60. Esto cautivó tanto a nuevos compradores como a fanáticos de la marca. Ford incorporó avances en tecnología, como sistemas de navegación y control de tracción, mientras mantenía motores V8 potentes en sus modelos GT y Shelby.
El Mustang moderno (2015-presente) representa la sexta generación, con un diseño globalizado. Por primera vez, adoptó una suspensión trasera independiente para mejorar el manejo. Motores EcoBoost eficientes coexistieron con los potentes V8. El Shelby GT500, con más de 700 caballos de fuerza, ejemplifica la evolución hacia un superdeportivo. Además, el Mustang Mach-E, un SUV eléctrico lanzado en 2020, desafió las tradiciones al combinar el legado del Mustang con la movilidad eléctrica.